Refrescarse es tan fácil como poner en práctica esta receta: Café frappé de vainilla... café intenso, helado, hielo…y decorar como más te guste: nata montada o en spray, caramelo líquido, adornos de repostería o chips de chocolate… Y además consigue más aroma con cacao en polvo o canela. ¡Nada te sentará mejor en las tardes calurosas de verano!
Paso 1:
Pon a enfriar los vasos en los que vayas a servir tu bebida en el frigorífico o en el congelador, si son de plástico.
Paso 2:
Prepara café intenso y colócalo junto al azúcar, la leche y el helado de vainilla en una batidora de vaso. También puedes hacerlo en un bol y usar una batidora normal. Ten en cuenta que primero debes batir de manera pausada para romper un poco el hielo y luego de forma continua, hasta que quede bien espumoso.
Paso 3:
Sirve el batido en tus vasos (mejor que sean altos) y decorar con la nata: o bien nata en spray o móntala tu mismo. Después espolvorea el cacao y añade el caramelo líquido para decorar. Puedes probar con otros ‘toppings’ como chocolate líquido o un poco de leche condensada.
Presentación:
Esta receta de Café frappé de vainilla se puede servir como postre o como una bebida bien fría. Coloca una pajita…y a disfrutar…
Más opciones:
El helado de vainilla se puede reemplazar por helado de tiramisú u otro similar al gusto.
Curiosidad:
Este tipo de café es muy típico en países como Grecia y Chipre, aunque ya es tremendamente popular en toda Europa, sobre todo en verano, cuando más apetece. El término proviene del francés frappé, que significa, en este contexto, ‘agitado’ o ‘helado’.
Truco:
También puedes llenar un vaso grande con hielo pilé, es decir, hielo picado. Y después verter tu mezcla cuando se haya enfriado un poco.
Sugerencia:
A cada persona le gusta un tipo de café (solo, en vaso, en taza, con dos gotas de leche, sin azúcar o con dos cucharadas bien cargadas…). En general, somos bastante ‘sibaritas’ con esto del café. Y si es tu caso, prueba el de marca DIA y disfruta de un intenso aroma y sabor.