Esta calabaza con picatostes emplatada así es un acierto seguro para una cena, te lo aseguro. Lo malo sería que a alguien no le gustara nada la calabaza pero eso se pregunta antes.
Lava la calabaza y la cortas quitándole la tapa y conservándola. Con una cuchara sacas las semillas y dejas las paredes con un grosor considerable pero que quepa relleno.
Pon dentro de la calabaza los picatostes y el queso en capas hasta que llegue hasta arriba la última capa, que debe ser de queso. Lo salpimientas a tu gusto y no lo mezclas. Añades la leche y le pones la tapa que has conservado.
En una bandeja de horno con papel de aluminio, pones la calabaza encima y la horneas durante 2 horas a 200º. Tranquilo que no se va a quemar.
Cuando sacas la calabaza del horno, le quitas tapa y mezclas el queso con los picatostes con cuidados. La vuelves a tapar y la presentas a tus invitados.