Estos cubitos de pizza son una sabrosa y originalísima cena o tapa que encandilará a todo el mundo, sobre todo a los niños. Sigue esta receta o haz varios rellenos diferentes: puedes usar tus ingredientes favoritos ¡y estarán igualmente ricos!
Paso 1:
Para empezar, precalienta el horno a 180°C de manera que esté listo cuando vayas a meter tus cubitos de pizza.
Paso 2:
Saca la masa de base de pizza del envase y extiéndela sobre la superficie de trabajo. Espolvoréala con harina de trigo para que no se pegue y, a continuación, extiéndela con un rodillo para hacerla más amplia y de menor grosor. Debe quedar una lámina fina de masa.
Paso 3:
Con ayuda de un cortapizzas rodante o de un cuchillo muy bien afilado, corta la base de pizza por la mitad. Esparce más harina sobre cada una de las mitades.
Paso 4:
Coge una cubitera de hielo que esté perfectamente limpia y seca y extiende una de las mitades de masa de pizza sobre ella, insistiendo en los agujeros para que la masa llegue hasta el fondo y respete la forma de la cubitera.
Paso 5:
Cubre el fondo de los cubitos de masa con tomate frito. A continuación, reparte por los huecos el queso mozzarella rallado. Distribuye una hojita de albahaca fresca por cubito.
Paso 6:
Humedécete los dedos y pásalos por los bordes de los cubitos. A continuación, sécate las manos, coge la otra mitad de la base de pizza y colócala encima, insistiendo para unirla por la zona de los bordes de los cubitos que acabas de humedecer. Desmolda la masa de pizza y recorta los bordes sobrantes.
Paso 7:
Con ayuda de nuevo del cortapizzas o del cuchillo afilado, recorta los cubitos para separarlos entre sí. A continuación, utiliza un tenedor para presionar sus púas contra los bordes; de esta manera los sellarás y evitarás que se escape el relleno.
Paso 8:
Reparte los cubitos sobre una bandeja de horno y mételos a calentar en el horno precalentado a 180°C. Deja que se horneen durante 10 minutos o hasta que veas la superficie de la masa de pizza dorada y crujiente. En ese momento, retira la bandeja del horno.
Presentación:
¡Ya están listos estos deliciosos cubitos de pizza! Sírvelos recién hechos y disfruta del contraste entre el crujiente de la superficie y la suave cremosidad del queso fundido en el interior.
Sugerencia:
Para que el relleno de tus cubitos de pizza resulte absolutamente jugoso, no dudes en utilizar una bolsa de queso mozzarella rallado de DIA. ¡Práctico y riquísimo!