Estas galletas quedan crujientes por fuera pero muy blanditas por dentro y además aguantan bastantes días en perfecto estado, ¿que más se puede pedir? bueno sí, que estén buenas, pues éstas están increíbles de sabor!! A que estáis esperando para probarlas? Elaboración Por un lado mezclamos los ingredientes secos tamizados, la harina, el cacao, la sal, la levadura, el bicarbonato y las semillas de lino. Por otro, el aceite con la vainilla, los azucares y el puré de manzana. Juntamos ambas mezclas y añadimos el chocolate negro y el blanco troceados, amasamos con las manos y formamos una bola.Dejamos reposar unas dos horas en el frigorífico envuelta en papel film. Precalentamos el horno a 180º Hacemos pequeñas bolitas de masa y les ponemos lacasitos, conguitos o fideos de colores, lo que más os guste.Las aplastamos un pelín y las colocamos en una bandeja de horno.Al no llevar mantequilla se expandirán muy poco por lo que el tamaño no variará demasiado. Horneamos durante 15 minutos.Al sacarlas veremos que aún están muy blanditas, no os preocupeis, se endurecen un poco al enfriarse quedando una galleta crujiente por fuera y con una textura suave en el centro.